jueves, 4 de junio de 2015

Junio 2015 - Análisis Politico

Argentina: Militarización “Democrática” para Sostener “el Modelo” o  Cambio Profundo de paradigma político, económico y cultural

La consolidación estructural de la pobreza en nuestro país, necesariamente va camino al control social y policial de los excluidos. O por el contrario, a la búsqueda de soluciones en el marco de un profundo cambio de perspectiva que oriente el desarrollo de todas nuestras potencialidades económicas.    
Un cambio de paradigma, que ordene territorialmente la economía y la población en forma descentralizada hacia toda nuestra geografía.   Un cambio, que centralice la Nación en el sur (Alfonsín fue un visionario en este sentido) y ordene los sistemas viales y ferroviarios conectando el país de norte a sur y viceversa.

Continuidad o Cambio.
El actual y vigente “modelo” político, económico y cultural, aparentemente, esta dando increíbles resultados electorales, por lo que sus continuadores no lo van abandonar. Es la lógica del poder.
La única esperanza esta en el cambio. Todo cambio en la estructura política genera esperanzas, pero también incertidumbres. Nadie sabe que va a pasar. Sin embargo, la continuidad  (políticas que dan buenos  resultados  en términos de poder no se cambia)  tiene, a mi criterio, un claro horizonte de militarización estatal para el control de los sectores sociales desfavorecidos. Y consecuentemente, con esto, la vida en el miedo de todos los grupos sociales.
Los conurbanos de nuestras grandes ciudades son ingobernables, inviables para el “buen gobierno”.  Así me confesaban mis “amigos sciolistas” en 2008. Ninguna política pública se puede organizar eficientemente.  No solamente en términos de seguridad, sino también en términos de salud, educación, empleo, vivienda, etc.
Sin embargo, esta inviabilidad para el “buen gobierno”, se demostró eficientemente viable para ganar elecciones y sostener el poder conquistado.
Asi, “la seguridad” se convirtió en el principal problema de política publica a resolver. Primero se intento con un mejor ordenamiento de las fuerzas policiales, pero esto no alcanzo. Posteriormente se sumo a las fuerzas federales (gendarmería, prefectura), pero tampoco esto alcanzo. Finalmente se llego a la incorporación masiva de efectivos policiales en provincias y municipios. La provincia de Bs As,  contara el año próximo con un ejército de más de 100 mil efectivos. Pero como ya estamos viendo, esto tampoco alcanzara. Sin ninguna duda, de haber continuidad de “el modelo”, tendrán que sacar los militares a la calle.  Un asustado Scioli, seguramente lo hará sin ningún problema.
La experiencia de caminar y observar mi barrio, me lleva a estas conclusiones.  No hay forma de detener el deterioro cultural de mis vecinos. No hay forma de detener  el avance del narcotráfico, hacia el pleno control de estas sociedades excluidas. El narcotráfico, reemplaza paulatinamente al Estado en estos barrios.  Garantizan “seguridad” a los vecinos  en las zonas de venta y proveen ilusión de “bienestar” y perspectiva de “ascenso social” a sus empleados. En los barrios de estas características, la venta de drogas es casi la única posibilidad de ingresos para la mayoría de los adolecentes y jóvenes.  Adolecentes y jóvenes que tienen muchos hijos.  Se multiplican las familias pobres miembros de organizaciones delictivas, que tendrán hijos pobres y nietos pobres. He aquí, la estructura de la exclusión y la marginalidad.

Apostar al Cambio
Un Nuevo Paradigma político, económico y cultural, es necesario. Una propuesta de mediano plazo, para la descentralización de la población a todo el territorio nacional.  En el marco de una economía descentralizada, que de trabajo a todos los Argentinos.
Gobernar es Crear Trabajo, no dar trabajo. Estos conceptos son muy distintos.  El objetivo debe ser la Justicia Social no la “inclusión social”, lo que es simplemente un medio.  Una Nación que tiene a la mitad de su población en condición de trabajar sin empleo, es una Nación que no tiene futuro, que no va hacia ningún lugar.
La opción,  parece ser, continuar con “la trata de pobres” o ir por el Cambio. Aunque no sepamos con seguridad hacia donde nos llevara dicho Cambio. A veces los pueblos apuestan. Y como decía Perón, los pueblos en su intuición, nunca se equivocan.


Omar Niz