Argentina:
Militarización “Democrática” para Sostener “el Modelo” o Cambio Profundo de paradigma político,
económico y cultural
La consolidación estructural de la pobreza en
nuestro país, necesariamente va camino al control social y policial de los excluidos. O
por el contrario, a la búsqueda de soluciones en el marco de un profundo cambio
de perspectiva que oriente el desarrollo de todas nuestras potencialidades
económicas.
Un cambio de paradigma, que ordene territorialmente la economía y la
población en forma descentralizada hacia toda nuestra geografía. Un cambio, que centralice la Nación en el sur
(Alfonsín fue un visionario en este sentido) y ordene los sistemas viales y
ferroviarios conectando el país de norte a sur y viceversa.
Continuidad o Cambio.
El actual y
vigente “modelo” político, económico y cultural, aparentemente, esta dando
increíbles resultados electorales, por lo que sus continuadores no lo van
abandonar. Es la lógica del poder.
La única esperanza esta en el cambio. Todo cambio en la estructura política
genera esperanzas, pero también incertidumbres. Nadie sabe que va a pasar. Sin
embargo, la continuidad (políticas que dan buenos resultados en términos de poder no se cambia) tiene, a mi criterio, un claro horizonte de militarización estatal para el control de
los sectores sociales desfavorecidos. Y consecuentemente, con esto, la vida en
el miedo de todos los grupos sociales.
Los conurbanos de
nuestras grandes ciudades son ingobernables, inviables para el “buen gobierno”.
Así me confesaban mis “amigos sciolistas”
en 2008. Ninguna política pública se puede organizar eficientemente. No solamente en términos de seguridad, sino
también en términos de salud, educación, empleo, vivienda, etc.
Sin embargo, esta
inviabilidad para el “buen gobierno”, se demostró eficientemente viable para
ganar elecciones y sostener el poder conquistado.
Asi, “la
seguridad” se convirtió en el principal problema de política publica a
resolver. Primero se intento con un mejor ordenamiento de las fuerzas
policiales, pero esto no alcanzo. Posteriormente se sumo a las fuerzas
federales (gendarmería, prefectura), pero tampoco esto alcanzo. Finalmente se
llego a la incorporación masiva de efectivos policiales en provincias y
municipios. La provincia de Bs As, contara el año próximo con un ejército de más
de 100 mil efectivos. Pero como ya estamos viendo, esto tampoco alcanzara. Sin ninguna duda, de haber continuidad de
“el modelo”, tendrán que sacar los militares a la calle. Un asustado Scioli, seguramente lo hará
sin ningún problema.
La experiencia de
caminar y observar mi barrio, me lleva a estas conclusiones. No hay forma de detener el deterioro cultural
de mis vecinos. No hay forma de detener
el avance del narcotráfico, hacia el pleno control de estas sociedades
excluidas. El narcotráfico, reemplaza paulatinamente al Estado en estos
barrios. Garantizan “seguridad” a los
vecinos en las zonas de venta y proveen ilusión
de “bienestar” y perspectiva de “ascenso social” a sus empleados. En los
barrios de estas características, la venta de drogas es casi la única
posibilidad de ingresos para la mayoría de los adolecentes y jóvenes. Adolecentes y jóvenes que tienen muchos
hijos. Se multiplican las familias
pobres miembros de organizaciones delictivas, que tendrán hijos pobres y nietos
pobres. He aquí, la estructura de la exclusión y la marginalidad.
Apostar
al Cambio
Un Nuevo Paradigma político, económico y cultural, es necesario. Una propuesta de mediano
plazo, para la descentralización de la población a todo el territorio
nacional. En el marco de una economía descentralizada,
que de trabajo a todos los Argentinos.
Gobernar es Crear Trabajo, no dar trabajo. Estos conceptos son muy distintos. El objetivo debe ser la Justicia Social no la “inclusión social”, lo que es simplemente un
medio. Una Nación que tiene a la mitad
de su población en condición de trabajar sin empleo, es una Nación que no tiene
futuro, que no va hacia ningún lugar.
La opción, parece ser, continuar con “la trata de pobres”
o ir por el Cambio.
Aunque no sepamos con seguridad hacia donde nos llevara dicho Cambio. A veces
los pueblos apuestan. Y como decía Perón,
los pueblos en su intuición, nunca se equivocan.
Omar Niz